Cada vez que compramos aparatos electrónicos caros como una computadora o un refrigerador, nos emociona usarlos pero también sentimos una especie de sensación para querer proteger el aparato. El nuevo electrodoméstico es nuestro bebé que resultó de años o meses de ahorro. De ahí la importancia de un regulador automático de voltaje.
Al igual que no queremos que nuestros dispositivos se ensucien o dañen por fuera, también debemos protegerlos internamente. Y con la electricidad que fluctúa ampliamente en diversos países del mundo, es importante usar un regulador automático de voltaje para proteger nuestros aparatos de las dañinas fluctuaciones de voltaje.
Beneficios de un Regulador Automático de Voltaje
Como se mencionó, el principal beneficio de un regulador automático de voltaje es proteger nuestros costosos electrodomésticos de las fluctuaciones de voltaje al regular la corriente que ingresa a nuestros electrodomésticos. Esto evita que los componentes eléctricos del aparato trabajen innecesariamente, reduciendo el desgaste de estos componentes. Es tan simple como eso.
Pero también es importante tener en cuenta que los reguladores automáticos de voltaje no son necesarios para todos los tipos de electrodomésticos.
Realidades del uso de este tipo de equipo
De hecho, te contaremos un hecho poco conocido. Los AVR solo se necesitan para electrodomésticos costosos, como sistemas informáticos, televisores de pantalla plana, refrigeradores, equipos de audio/video, consolas de videojuegos y otros aparatos igualmente costosos.
Esto se debe a que estos dispositivos son más propensos a sufrir daños por fluctuaciones de voltaje si contienen componentes electrónicos sensibles, que normalmente se encuentran en electrodomésticos costosos.
Ahora que conoces los beneficios de un regulador de voltaje automático, también es importante identificar qué tipo de AVR debes comprar para tus dispositivos. En general, hay dos tipos de reguladores. El primero es de tipo relé y el segundo de tipo servomotor. Ambos tienen el mismo propósito de regular la entrada de voltaje de un aparato, pero cada uno de ellos tiene sus propias fortalezas y debilidades.